Miami rumbo al título

Hambrientos de Gloria

Desde el momento que apareció este monstruo de tres cabezas llamado Miami Heat las expectativas crecieron de manera exponencial. Y las críticas también. Ganaron varios adeptos por tener en la plantilla a tres de los mejores jugadores de la NBA en ese momento. Ganaron también detractores; la novela LeBron James y el "desequilibrio" que provocaron en la liga generaron actitudes negativas de cierto público, celos tal vez. Comenzamos (sí, yo era uno de ellos) a establecer metas inalcanzables para cualquier equipo, más si es uno en construcción; ganar de principio a fin, 82 - 0, en la temporada regular y barrer con todos los equipos en los Playoffs. De no lograrlo, su jugarreta debía considerarse un fracaso. 

Fuente: upi.com

Irreal e injusto.

En su segunda temporada este equipo logró lo que se había propuesto con un basket envidiable. Y me tapó la boca. Reconozco mi antipatía hacia LeBron James, irracional e infantil; pero también reconozco el altísimo nivel en el que se encuentra actualmente. Merecido MVP esta temporada, promediando 27 puntos, 8 rebotes, 6 asistencias y 2 robos por partidos. Es él quien guía a los Heat por el camino al título.

Acompañando el gran trabajo de LeBron estuvo su buen amigo Dwyane Wade, que supo dejar su ego de lado y asumir el rol de escolta y acompañante del "Rey" James. Ambos jugadores se complementan muy bien, tomando el liderazgo dependiendo del contexto del equipo y de lo que le ofrece la defensa rival. Si uno anota el otro pasa, jala marca. Siempre está uno en la cancha, lo que no permite descuidos por parte del contrario. Palmas para el joven entrenador Erik Spoelstra.

El trío campeón lo cierra Chris Bosh, que tal vez sea el más subestimado de los tres. El público parece olvidar que era Bosh el que hacía a los Toronto Raptors (hoy equipo enterrado en las últimas posiciones) contendiente a los Playoffs de la Conferencia del Este. Lesionado gran parte de los partidos de post-temporada, fue en la final donde se recuperó y mostró su invalorable aporte al equipo, siendo la válvula de escape cuando los dos aleros estelares están marcados, cogiendo rebotes y preocupando a los defensas rivales en la pintura. Sin Bosh la historia sería muy distinta.

Por estos tres jugadores, por el juego de equipo que han demostrado la última temporada y por la gran defensiva (palmas nuevamente para el entrenador), este equipo debe ser considerado el principal candidato a repetir el plato. Pero eso no es todo.

Fuente: nba.com/heat

Además de los cracks que conforman al Heat, Pat Riley no se quedó dormido y reforzó su plantel con el que es, a opinión de este humilde periodista, el triplero más confiable de la NBA en la actualidad, Ray Allen. Y los números me apoyan, ya que lo colocan como el jugador con más cantidad de triples anotados en la liga. La temporada pasada el  equipo de Florida tuvo en un lesionado Mike Miller las esperanzas de anotación desde los tres puntos. Con él recuperándose de su problemas en la espalda y Ray Allen como triplero designado, se espera tener un juego completo, donde el rival tendrá que precuparse de cerrar la zona para evitar penetraciones de Wade y James a la vez que tendrá que asegurarse de no dejar a uno de estos cazadores de triples libres en el perímetro. Señores, elijan su veneno. 

El único punto bajo que puede tener el Miami Heat es en lo que respecta a su juego interno, en especial la defensa. Se especula que Chris Bosh pase a jugar en la posición que más le incomodaba en Toronto, la de centro, en algunos partidos (más acá). Si bien tiene la habilidad en los pies para moverse en la pintura durante el ataque, no tiene la contextura física suficiente para parar a rivales como Dwight Howard o Blake Griffin, lo que debe ser la principal preocupación para el cuerpo técnico. Ocurre lo opuesto con Joel Anthony, pivot titular la temporada pasada, ya que ofrece una gran capacidad de rebotes y tapas, pero da muchas ventajas en cuanto a la físico (no es un jugador muy alto para la posición) y en lo ofensivo es casi nulo. Veremos cómo resuelve el problema Spoelstra. 

Queda a la opinión de ustedes decidir si lo tienen como su candidato o no para este año. Lo que sí no pueden negar es que si no lo eligen, le va a dar mucha pelea a su equipo. 

La encuesta de esta semana estará dedicada a este equipo, no se olviden de contestar ya que analizaremos las respuestas en el siguiente post!